En un cordial y fraterno diálogo, el Card. João Bras de Aviz, valoró a la Confederación latinoamericana y caribeña, como un organismo históricamente importantísimo, agradeciendo la labor realizada a lo largo de sus 64 años de existencia.
En el diálogo, animó a seguir trabajando por valorar e integrar las diversas culturas en su belleza originaria, para evitar toda centralización, segregación y protagonismo de unas sobre las otras. El trabajo intercultural se presenta como uno de los desafíos clave para este tiempo sinodal.
El tema del poder y de los abusos, también estuvo presente en el diálogo. Invitó a ser cada vez más conscientes de las víctimas que sufren este flagelo en las comunidades religiosas; recordó la necesidad de propiciar un estilo de vida comunitaria en la que sea posible desarrollar la libertad personal y una sana convivencia.
Comprometidos en mantener el diálogo y la comunión, agradecemos este momento vivido en comunión con toda la Vida Religiosa que peregrina en el Continente.