Este primer movimiento por donde nos empuja la Ruah Divina es un despertar a la vida desde una profunda e inquietante esperanza. Acercarnos a las Mujeres del Alba, es sumergirnos en una honda contemplación y en un desafiante itinerario espiritual hacia la vida. Ellas, pese a todo, contra viento y marea, son capaces de surcar la noche hasta encontrarse con los destellos de la luz del alba.
Desde la alegría y la novedad de la Pascua, estas mujeres de ayer y de hoy, nos regalen la Ruah Divina para ser testigos de esperanza en el corazón de la comunidad.