“La mejor política” lleva a vivir juntos y como hermanos
Por supuesto la política está muy ligada a la vida de las personas. La buena apunta a que nuestra sociedad sea un espacio acogedor para todos; para ello tiene que estar impregnada y conducida por la verdad y el bien. Eso se consigue cuando se da una sana conexión entre ética, evangelio y política. Como fruto de ello sí se logra mejorar el alma de los ciudadanos.